
Grand Libalis a la vista presenta un color amarillo pálido con notas doradas, limpio y brillante.
En nariz Grand Libalis posee una alta intensidad aromática, prevalecen los olores a frutas frescas almibaradas, el chili, la piña, el mango o la papaya, son fácilmente perceptibles. Junto a ellos al Grand Libalis, nos trae recuerdos a miel, mermeladas y algunas hierbas aromáticas que nos recuerdan al eneldo o el tomillo. Todo ello otorga a Grand Libalis una fase olfativa muy compleja, equilibrada y elegante.
En la fase gustativa Grand Libalis es un vino envolvente, de gran untuosidad y elegancia, con un final fresco y agradable y de gran persistencia. Su retrogusto nos deja un recuerdo muy agradable a las frutas dulces a las que hace referencia en la fase olfativa.
Grand Libalis es un vino elaborado con mostos extraídos de las uvas Moscatel de Grano Menudo y Riesling procedentes de viñedos jóvenes, plantados en 1999 en suelos arcillo-calcáreos.
La vendimia de las uvas con las que se elabora Grand Libalis se lleva a cabo de forma mecanizada durante la noche, aproximadamente en la última semana de agosto, cuando las uvas han alcanzado su grado de maduración idóneo.
Tras la vendimia las uvas con las que se elaborará Grand Libalis se realiza una rigurosa selección, tras esta, la uva es sometida a un proceso de frío y a una prefermentación con la que se consiguen extraer las mejores cualidades de la uva Moscatel de Grano Menudo y de la Riesling.
Tras esto Grand Libalis lleva a cabo la fermentación alcohólica en tanques de 20.000 litros, a temperaturas no superiores a 15ºC y se detiene en su tramo final para obtener un dulzor natural, junto con la acidez proporcionada por la riesling, que otorgan a Grand Libalis elegancia, equilibrio y complejidad.
Grand Libalis es un vino ideal para maridar con arroces, pastas, verduras y ensaladas. Su dulzor natural lo hace especialmente idóneo para acompañar foies donde la untuosidad y dulzor natural de Grand Libalis realzará las propiedades de estos. También puede acompañar pescados blancos y mariscos o aperitivos variados, gracias al sutil grado de acidez que le otorga la uva riesling a Grand Libalis