
Tras este singular nombre ´De Puta Madre´, se esconde un vino de Rueda cuya autoría pertenece a François Lurton que pretendía recuperar la esencia en la elaboración los afamados vinos antiguos de Castilla y León. De Puta Madre es un vino monovarietal de la uva autóctona verdejo, procedentes de viñedos con más de 40 años. La vendimia, que se realiza de forma manual es tardía, cuando el fruto es ya se encuentr sobremadurado. Tiene una crianza de 24 meses sobre sus lías. Este vino debe su peculiar nombre a la valoración que sus elaboradores le dieron cuando lo probaron por primera vez "De Puta Madre".
De Puta Madre es un vino ideal para acompañar, arroces, especialmente si son acompañados con pescado, carnes blancas, jamón ibérico de bellota, foie y carnes blancas. La temperatura ideal de servicio de este vino se encuentra en torno a los 8º
La cata visual de De Puta Madre nos muestra un vino con un intenso color amarillo, adornado con algunos reflejos dorados. Se trata de un vino muy brillante y limpio. Muy atractivo visualmente.
En nariz cuenta con una notable intensidad aromática. Los olores primarios propios de la uva verdejo nos traen al recuerdo frutas blancas de hueso ya maduras, casi melosas, junto con algunas reminiscencias cítricas. Frutos secos y algunas especias hacen aparición también en nariz lo que acaba formando un vino complejo y lleno de matices que merece la pena apreciar con paciencia.
En boca De Puta Madre es un vino con un gran equilibrio, dulzor, acidez y su paso por madera le otorgan sensaciones sorprendentes que nos invitan a seguir bebiendo.